sábado

Invierno.

Está nublado fuera. Dentro hace una temperatura agradable. Frente a mi ordenador, como todas las mañanas. Pero esta vez es diferente, esta vez tengo alguien ahí que me escuche, que lea, que me observe. Estoy un poco cansada, pero no hablo de un estado físico, sino más bien mental. Mi cabeza creo que no da para más, ese momento en el que todo se colapsa. Creo que está cerca. Los momentos vividos, pegada a esa piel, su colonia. Las tarde de lluvia, en las que corríamos empapados para acobijarnos debajo de cualquier cobertizo. Lo recuerdo con una sonrisa. Pero una lágrima, no puede evitar derramarse. La temperatura agradable, se convierte en un frio cadavérico. Ya no estás aquí.

2 comentarios:

  1. Holaaa

    Mola este blog, y la entrada. Te seguiré leyendo. Has caído en mis redes antes que yo en las tuyas del tuenti, huajajajaa xDD

    ResponderEliminar
  2. Buenas.
    Cotilleando blogs de amigos de amigos he visto este tuyo.
    Me gusta como escribes, así que aquí me tienes, siguiendolo a partir de ahora ;)

    ¡Un besazo!

    ResponderEliminar